He aquí Daniela una dulce y tierna nenita que conmueve con su hermosa sonrisa y al ver su cuerpo provoca los pensamientos más sucios en cualquier gilipollas, incluso es capaz de persuadir su propio padre de hacer un incesto. Espera en su cama usando solo una pequeña tanga para seducir a su padre con quien desde hace mucho desea follar. Logrando su cometido la joven guarra se marcha con el polvo que esperaba y la lefa de su progenitor por doquier.